Cerca del mediodia, partimos por fin de Dease Lake, subiendo 400 mts bien verticales sin parar. Llegamos a las montanas, que se vian a o lejos a comienzo de la ruta, cruzamos el Paso Gnat Lake de solo 1100 mts, pero que bien nos costo subir. El paisaje debe haber sido precioso, pero la lluvia y el viento , muy frio, no nos dejaron disfrutarlo.
Todo lo que sube, baja. Pero con la lluvia tuvimos descensos, de estilo mountain bike, entre el ripio, el barro y los crateres en la ruta. Cuando terminamos de bajar, llegamos a otro rio. Es que nos hemos pasado toda la Cassiar Highway subiendo y bajando a los rios y subiendo otra vez del otro lado … los puentes, se ve que no entraron en el presupuesto, para esta ruta.
Un tramo de la Cassiar, no de ese dia , porque llovia mucho y ,a ruta definitivamente era un barrizal !
Llegamos al Stikine River, al atardecer. Holly nos habia recomendado ir a ver a uno de sus amigos, una pareja mayor de nativos, que eran gente muy bonita, y que ella conocia de los servicios de su iglesia. Nos dijo que ella iba a advertirles de nuestra llegada. Read the rest of this entry »
Lhasa – Katmandú – 14 de Mayo, 2006
Lhasa Khatmandú es una ruta bien famosa que conecta dos ciudades míticas e increíbles, y suena bien.. no?? pero no hice todo el camino en la bici, de hecho solo pedalee la mitad y pase casi todo los pasos de mas de 4500 mts en jeeps, colectivos de turistas, la expedición que iba al Everest… Pero realmente disfrute mucho de los días pedaleando… iba sola por unos 25 días hasta reencontrarme con Christophe en la frontera, y fue una experiencia bien distinta.
Disfrute mucho del contacto con la gente, del paisaje montañoso y seco, desértico, casi como San Juan, las villas chiquitas difíciles de diferenciar del paisaje terroso, si no fuera por las coloridas banderitas flameando en los techos… de las coloridas ropas dela tibetanas, en los campos áridos de papas ,con sus yaks también elegantes, con cintas de colores, arando la tierra, reparando rutas; del cielo tan azul, del aire fresco y limpio y seco…, hasta mas o menos las 4 o 5 de las tarde en que invariablemente empezaban las tormentas de arena que me dejaban completamente marrón enterrada en polvo y tierra, algunos días peores que otros,no se podía ver nada de nada, y había que pedalear en ráfagas y parar cada tanto esperar y seguir…limpiarme los ojos, ver si había alguna curva sospechosa y seguir masticando arena y mirando ansiosamente el computador de a bici, para ver cuantos km faltaban para llegar a algún lugar.